Pavimento hidráulico: Un invento español
Un pavimento hidráulico es una pieza de baldosa decorativa de cemento pigmentado, destinado a uso tanto interior como exterior.
Se trata de un invento español que se remonta a 1857, aunque su uso normalizado se produjo 10 años después, como producto alternativo a la piedra natural (mármol fundamentalmente)
La innovación del pavimento hidráulico viene dada por ser un tipo de baldosa que no requiere cocción, sino que se consolida mediante prensas.






La innovación de este tipo de pavimento consiste fundamentalmente por componerse de un tipo de baldosas que no requerían cocción, sino que se consolidaba mediante prensas.
Es importante remarcar que si bien su uso ha disminuido, todavía existen muchas fábricas que los siguen realizando de la manera tradicional tanto para su uso en la restauración de antiguas casas, como para ser colocados en propiedades nuevas.
El sistema de fabricación del suelo hidráulico no ha cambiado prácticamente nada desde sus orígenes. Las baldosas hidráulicas no están hechas de barro o adobe, ni cocidas, como en el caso de las baldosas de cerámica. Como su nombre lo indica, estos suelos están hechos de cemento comprimido con prensas hidráulicas. Esto les confiere una gran resistencia y solidez.